Noticia extraída de: www.eldiariomontanes.es (Abel Verano)
La incesante lluvia que cayó el pasado lunes en toda la región apenas provocó daños en Castro Urdiales. La actuación de los bomberos se limitó al achique de agua sobre todo en la pedanía de Sámano y los barrios de Helguera y Montealegre. También tuvieron que intervenir en el polígono de La Tejera, el aparcamiento del hipermercado Eroski y el IES Zapatero, para continuar por la carretera N-634, a la altura de la fábrica de Conservas Lolín. En el paseo de Ostende, la marea también hizo de las suyas e inundó la parte posterior del polideportivo Peru Zaballa, instalaciones que sufren daños cada vez que en el municipio llueve de manera incesante. Los bomberos, que también tuvieron que intervenir en la N-634 a su paso por Islares y en los municipios de Guriezo y Liendo, realizaron 32 servicios de emergencia y 12 inspecciones.
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